Hoy mi cuerpo,somatiza tu
ausencia
Esta anestesiado de dolor
No sé muy bien, si respira.
Me siento herida, culpable y dolida
No sé muy bien la causa, de tu
despedida.
Envuelta en tu sonrisa
Me deje llevar, por tu euforia
desmedida
Creí lo que me decías
Tus palabras fueron mi locura.
Cuando tu estampido, ya estaba herida
quise correr y caía, lenta
Por el precipicio, rendida.
Me metí en la cama
Pensé que despertaría
Que un domingo de marzo
Remediaría, nuestra relación
Beligerante de un día.
Me sentí observada en la manada
Estaba tranquila,aún no te
conocía
Sabía, que era yo, en la que
te fijarías.
Me sentí, importante,
perseguida
Y todo eso, me seducía.
Esperaste a verme correr
Afinaste tu puntería
Era tu mejor trofeo
Pensaste, que no me alcanzarías.
y yo, que me creí segura
Que ya había escapado, de
varias heridas
todas ellas, en mi piel
poco profundas
dejándome cicatrices bonitas
que ya no dolían.
Salte más alto, sentí la brisa
Confiada, me imaginé volando
Como mariposa pérdida
Y se me olvidó, que me apuntarías.
Oí el ruido de un estampido
Sentí algo de mi cuerpo,
entumecido.
El olor de la pólvora
Paso a mi cuerpo en segundos
Sintiéndola
Como a una droga
dura
Que me devolvía
por un momento, a la vida.
pude ver tu emoción
Mientras mi latido corría
Más que mi cuerpo
Que ya, no me respondía.
Finalmente caí, ceso mi huida
Recibí el toque perfecto, de
tu puntería.
No sentí el golpe de la caída
Pero sí, mi boca adormecida
Tocando la tierra fría.
Mis cuernos bellos
Que nunca tocaron suelo
Quedaron inmóviles
Esperando tu ayuda.
Aún no sabía
Que sería, sólo un trofeo
Para tu
vitrina.
Escuché por última vez tu voz
Hipnotizada, mientras me
hablabas
Sin entender, como no te apiadabas
Y buscabas remedio
Para mis manos confundidas
Que ahora ya, no sabían, si te tocarían.
Y yo que soy, de ser libre
Cual muflón, que huye de su
cazador
Soñé con convertirme en mujer
Para dormirme en tu cama
Sin tener que decir nada
Despertarme y que me abrazaras.
Para sentir que muero
Y que contigo, puedo renacer de nuevo.
